Inquebrantable compromiso con la palabra

 

Por Sergio Díaz

Foto: Sergio Parra

 

En una primavera convulsa, plagada de citas electorales que van a marcar una nueva etapa en nuestra historia -quien sabe si más oscura-, se hace necesario arrojar luz sobre lo que somos como sociedad y sobre la responsabilidad individual que tenemos cada uno de nosotros con el tiempo que nos ha tocado vivir. La responsabilidad con los demás a través del compromiso con la tolerancia. El mandato supremo de ser honestos y consecuentes con nuestros actos, pero nunca cerriles. De tender puentes hacia los demás, aunque sus ideas nos sean ajenas y lejanas, para tratar de acercarnos como seres humanos.

José Luis Gómez vuelve a meterse en la piel de una de esas personalidades históricas que nos han enseñado a tomar el camino arriba indicado. Unamuno: venceréis pero no convenceréis, es un monólogo íntimo sobre una de las figuras más relevantes de la historia de España.

José Luis Gómez se desdobla y encarna a la vez a un actor que interroga a Unamuno acerca de su postura al comienzo de la Guerra Civil y al personaje histórico. Un montaje, codirigido por el propio Gómez y Carl Fillion, sobre el escritor y pensador, insigne miembro de la Generación del 98 y el rector de la Universidad de Salamanca más joven de la historia. Un intelectual, una figura iconográfica dentro y fuera de nuestras fronteras. El montaje indaga en la parte más humana de un intelectual lleno de contradicciones a través de sus reflexiones, cartas y poemas tardíos junto al memorable discurso que pronunció el 12 de octubre de 1936, en el paraninfo de la Universidad de Salamanca. El contexto político y social actual nos demuestra que la figura de Miguel de Unamuno es absolutamente urgente y necesaria, y nos enseña que sólo nuestro compromiso con la palabra puede llevarnos a construir una sociedad moderna, libre, responsable y en paz. Sobre todo en paz.