El actor José María Pou regresa a los escenarios madrileños, en esta ocasión lo hace para presentar Viejo amigo Cicerón en el Teatro La Latina, a partir del 4 de febrero. Un texto firmado por Ernesto Caballero y que cuenta con la dirección de Mario Gas.

 

«No podemos cambiar el pasado, pero debemos prever el futuro»

 

 

Por Redacción

Foto portada David Ruano

 

Un Cicerón consumido por su deseo de inmortalidad es el nuevo reto escénico al que se enfrenta el actor y director José María Pou que, después de haberle visto interpretar al Capitán Ahab o Sócrates en sus últimos trabajos, llega con esta producción estrenada en la 65 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida. Una propuesta que según dicen los responsables de la producción «En un momento de batallas dialécticas en los parlamentos y las redes sociales, presenta la relevancia histórica y las contradicciones íntimas de una de las figuras fundamentales de la política y el pensamiento clásico».

Viejo amigo Cicerón, además de ofrecernos la oportunidad de disfrutar de Pou sobre el escenario bajo la dirección de Mario Gas, cuenta en su elenco con Alejandro Bordanove y María Cirici, en una historia que nos cuenta cómo dos jóvenes estudiantes que investigan sobre la figura de Cicerón en una biblioteca, se encuentran con un tercer personaje inesperado que les invitará a trasladarse, de la época actual, a la Roma republicana para reflexionar sobre la ética, la moral, la justicia y la convivencia.

«Es una obra centrada en la figura del célebre orador romano, protagonista destacado de las intensas luchas y las violentas transformaciones acaecidas en el siglo primero anterior a nuestra era» dice Ernesto Caballero «nuestra propuesta participa de características propias del mundo del hombre y la mujer de nuestros días, tanto es así que en el texto aparecen expresiones próximas al lenguaje conciso y coloquial de nuestro tiempo presentando una obra cuya principal intención es, al modo ciceroniano, suscitar el debate cívico de nuestro momento histórico».