El Festival Internacional de Teatro de Títeres de Segovia Titirimundi es un festival único en el mundo en el que “tocar la luna” con las manos y “guardar las palabras en el bolsillo” no es una quimera. Durante 31 años ha sido posible gracias a su artífice, impulsor del arte del teatro de títeres en España, Julio Michel, y a su equipo que, tras la pérdida de su mentor en junio de 2017, recoge su legado bajo la dirección de su brazo derecho, Marián Palma, y con el espíritu que él imprimió: celebrar un festival como se celebra la Vida, volviendo a su esencia, pasando “no de lo posible a lo real sino de lo imposible a lo verdadero”, que diría María Zambrano. Todo a través de un mundo fantástico, ese con el que, alguna vez, hemos soñado.

 

Por eso, la 32º edición sin él tenía que ser un homenaje a su persona, y a todo lo que pretendía con este festival: una fiesta de los sentidos, “el espectáculo del mundo mismo, más verdadero que la verdad”, que expresaba Ionesco, su capacidad para transmitir las emociones humanas y descubrir las huellas de la eternidad con una forma infinitamente simplificada, caricaturizada, conmovedora, como es el teatro de títeres.

 

A través de 473 funciones, 383 en Segovia capital, donde se realizarán 63 representaciones diarias gracias a 33 compañías de 14 países, Titirimundi volverá a irrumpir con lo maravilloso en la rutina, un regalo que ha hecho al mundo del títere, después de haber llevado al Festival a ser considerado como “uno de los más reconocidos y de mayor prestigio en el mundo” –tal y como aseguran profesionales de diferentes países y público-. Pero también a convertir a toda una ciudad, Segovia, en núcleo anual de las artes de la marioneta, cuyas plazas, calles, patios históricos, iglesias y teatros (32 espacios), desde el 10 hasta el 15 de mayo, se transformarán en esos lugares de fantasía y realidad donde parecen revelarse los misterios de la existencia.

 

 

32 Festival Internacional de Teatro de Títeres Titirimundi de Segovia en Madrid
El circo de las pulgas

 

 

 

La gran carpa del Circo Rasposo y pequeños espacios donde soñar

Si el continente es ya un regalo, el contenido lo eleva: el Circo Rasposo, una de las mejores compañías de circo contemporáneo del mundo, mostrará La dévORée en su espectacular carpa: un montaje inspirado en el mito de Pentesilea y en la obra homónima de Henrich von Kleist, en una pieza de idealismo puro y de ‘nuevo circo’ francés, y gracias a una historia de pasiones que arrasa el corazón.

 

Además de la pequeña carpa de El circo de las pulgas, La Méandre envolverá a una docena de espectadores por función en un sueño poético gracias a un montaje habitado por personajes que se escapan del lienzo dentro de una caravana donde se combinan las artes digitales, la música y el teatro de objetos. Desde los Países Bajos, llegará Vincent Rooij y su espectáculo dentro de la mitad de un auténtico aeroplano Antonov2 donde suceden cosas fulgurantes con giros inesperados.

 

 

 

El estreno en castellano de Tàbola Rassa y una llamada al respeto y cuidado de la Naturaleza a través de una exposición y siete talleres

La compañía Tàbola Rassa, cofundada por el destacado titiritero y actor Miquel Gallardo, que también el año pasado el mundo del títere sufrió su pérdida, estrenará en castellano, y en una versión actualizada, las Fábulas de Jean de la Fontaine, que han girado por Francia desde 2009 con un éxito ensordecedor bajo la dirección de Olivier Benoit. Catorce fábulas sobre la violencia que el ser humano ejerce sobre la Naturaleza y sobre sus prójimos representados por personajes de material reciclado y en manos de una compañía, autora del memorable El avaro, que es una referencia en su género.

 

Un canto a la Naturaleza y al ser humano que protege su entorno es también el espectáculo El hombre cigüeña de Titiriteros de Binéfar, que mostrará en Segovia en su 40 aniversario, además de Cómicos de la legua, con el que han querido recordar a Michel el sábado en San Martín.

 

Sobre el “consumo consciente y responsable” y el problema del impacto ambiental, Guixot de 8 volverá con sus “juegos con alma”: un canto a la imaginación a través de una treintena de juegos construidos con materiales de recuperación a disposición del público para que juegue libremente. Desde el juego y para el juego, la exposición que este año ofrece Titirimundi en el Palacio de Quintanar: Folitraque del artista Ángel Haro. Esculturas creadas con objetos encontrados, heridos por el tiempo y el abandono, restos, rastros, ruinas, soledades, encuentros, juguetes caseros llegados desde el fin del mundo, llenos de vida renovada: de un zapato nace un coche, de una columna de botes de conserva, un cohete espacial y el espectador sueña, pero también asume un compromiso ecológico. Una reflexión sobre los límites reales de la creatividad en tiempos tecnológicos y la ilimitada fuente de energía que es la imaginación.

 

Y las manos otra vez. Tocar, sentir, elegir el mundo en el que queremos vivir… Los 7 talleres que propone Titirimundi siguen el concepto de utilizar material descartado como parte de lo que deja la memoria para dotarlo de pura vida. Dedicados a los niños, el constructor de títeres Gabriel Belloni y El trastero de Lula, en sendos talleres, mostrarán a los más pequeños cómo se crea un títere con material reciclado; Gigantea invitará a los más pequeños a pintar figuras de cartón piedra; se podrán crear personajes con materiales electrónicos desechados, y Tamanka Teatro proveerá a toda la familia de un espectáculo-taller. Además, un taller de sombras con las manos, y, para adultos, la octava edición del taller de talla de títeres, impartido por Chris Geris, que siempre deslumbra por la destreza y la sencillez de sus figuras.

 

 

 

Una mirada atenta hacia el teatro de títeres y objetos más intimista

El Festival mirará atentamente al teatro de títeres y objetos más intimista, el de las cosas pequeñas y los detalles que hacen relevante la existencia. Los Hermanos Oligor traerán un montaje en marcha desde hace más de una década, actualizado y conmovedor como el primer día: Las tribulaciones de Virginia, envuelto en una atmósfera decadente, con antiguos juegos mecánicos y cuentos de cuerda de algunas culturas americanas indígenas. Cuando empiezas una historia de amor crees que va a ser para siempre. Y, a veces, no es así. Un día la magia como viene se va… Te desenamoras… Junto a la compañía mexicana Microscopía, también ofrecerán La Máquina de la soledad, un homenaje al objeto-carta como único medio de decir «Me importas», a través de correspondencia recuperada en rastrillos de México y España, objetos, imágenes y anécdotas insólitas, gracias a las que se cuentan historias anónimas que han viajado en el tiempo y en el espacio.

 

Vida es el delicado, sutil, tierno, divertido e íntimo espectáculo más reciente de Javier Aranda, que habla precisamente de eso, del implacable paso de la vida y del tiempo, desde que nacemos hasta que morimos, en una constante migración hacia delante. Como hacia adelante va Stephen Mottram, uno de los más destacados exponentes del teatro de títeres, y su último montaje: Paracaídas, una historia hipnótica sobre la juventud, el amor y la vejez antes de dar el salto final hacia lo desconocido, que juega con la forma en que nuestros cerebros interpretan las cosas que vemos. Y D’Irque & Fien, iconos de la calle, montarán su espectáculo en Sol bemol en interior, como homenaje a Michel. Un espectáculo soñador y curioso, en tono de cine mudo y circo de alto nivel, donde dos personas se balancean desde un ‘hola’ a un ‘cómo estás’, en un viaje lleno de desafíos, sorpresas… Y esperanza. Como la vida.

 

 

 

Cristobita y el mítico pasacalles de una de las compañías históricas y más prestigiosas del teatro de títeres

Entre los espectáculos-homenaje a Julio Michel, el montaje estrella de su vida, Cristobita, uno de los espectáculos talismán del grupo Libélula y Julio Michel. En manos de El Retablillo, con el legado recogido por su discípulo David Faraco y Sofie Krog, el público volverá a salir a buscar a este personaje, nieto de Don Cristóbal, como lo hizo Libélula, allí donde se sabe que saciaba sus pasiones: en las tabernas, en las plazas de toros, en casa de su amigo el barbero, o en el castillo embrujado que guarda prisionera a una bella cautiva. Tres pequeñas obritas con títeres de cachiporra que son adaptaciones basadas en los géneros populares del repertorio tradicional europeo y, sobre todo, de los ‘robertos’ portugueses.

 

Además, el Pasacalles de músicos, gigantes y cabezudos de la antigua Deliciosa Royala, una de las compañías históricas y más prestigiosas de teatro de muñecos en España. Hoy, más de 30 años después, la Fundación Muñecos por el Desarrollo, fundada por dos de sus creadores, recupera el mítico Pasacalles con el que recorrió las plazas y rincones de la geografía española, formando parte también de la programación de varias ediciones de Titirimundi, y volviendo a llenar de fiesta las calles de Segovia.

 

Además, el Ensemble TMC18 rendirá homenaje al titiritero con un Concierto en familia, en el que hubiera sido el narrador del cuento musical Pedro y el lobo.

 

 

 

Por el bien de la Humanidad. Maestros del títere de guante, la ilusión y la pantomima

Punch & Judy y Pulcinella son espectáculos y personajes que componen también la identidad de Titirimundi y su objetivo de albergar siempre un espacio para mostrar el arte de teatro de títeres tradicional de cachiporra, sin que la perversión de los personajes centenarios pueda inducir a la violencia, y donde la parodia, la sátira, la burla, representan píldoras saludables y necesarias contra la hipocresía y el cinismo social. Rod Burnett nos dejó hace un año y su maestría, su persona y su Punch & Judy se mantendrán vivos en nuestra memoria. Dan Bishop, de The Punch and Judy College, el corazón del arte de este personaje, parecía una buena elección después de haberlo representado durante 40 años y en 15 idiomas. Por eso estará en Segovia. De la mano de uno de los grandes maestros del títere de guante, Salvatore Gatto, los personajes de la Comedia del Arte, que llevan 30 años representándose en Segovia sin que nadie se soliviante, estarán ahí siempre por el bien de la Humanidad, y por expreso deseo de Michel, para deleitar y grabar en la memoria de los espectadores su popular repertorio, tan necesario para exorcizar los prejuicios y disfrutar desde los ojos de la inocencia.

 

Desde la tradición oral y el juego, para devolverlos al espectador en un pedacito de historia y espíritu, Rodorín y su Retablillo de títeres y cuentos, una obra donde no faltan ni la poesía, ni los cuentos, ni todos esos personajes que pueden salir de un saco; o Quitapesares y La larga lengua del cuento, con el maestro Federico Martín Nebrás.

 

La ilusión y los antiguos circos de pulgas se mantendrán en Titirimundi gracias a Dominique Kerignard, con uno de los espectáculos más seguidos y en el que se mezcla el humor y la manipulación de objetos al más puro estilo de las antiguas barracas de feria. Desde América, El Chonchón también estará en Segovia con su maestría en la técnica del títere de guante y sus historias, referentes de las marionetas latinoamericanas, gracias a dos espectáculos: Juan Romeo y Julieta María, versión libérrima de la obra shakesperiana donde el humor no desvirtúa la tragedia; y Los Cómicos del novecientos, un homenaje a los cómicos del cine mudo. O el peruano Hugo Suárez, cuyas aportaciones al mundo de los títeres, transformando la pantomima en una creación de figuras animadas en miniatura con su propio cuerpo, le acreditan como uno de los grandes artistas de este siglo.

 

 

 

Más teatro de objetos. Y audacia…

Llevar un clásico como La Odisea al teatro de objetos, recreándose en las contradicciones y penurias del héroe, e incluso manipulándolo como lo haría Zeus, linda con la sinrazón. Por eso tenía que ser La Chana quien lo llevara a escena de esta manera… Audaz, hilarante, necesaria, con la intención de reírnos de nuestras propias miserias… Además, la compañía Bakélite regresa con un montaje loco y audaz que creó género: Braquaje, donde el espectador experimentará los pasos esenciales de un atraco con objetos que se convierten en personajes de inventiva inagotable, y su más reciente espectáculo: Invasores. Una invasión extraterrestre con platillos volantes, extrañas criaturas (parece que no son buenas), el despliegue de las fuerzas armadas y la destrucción de las principales capitales. Tal vez sea el fin de la Humanidad.

 

 

 

Para los espectadores más pequeños

Porque un simple soplo de viento puede abrir la mayor de las preguntas… Delicado e imaginativo es Viento, el espectáculo de teatro sensorial y visual de la compañía danesa Madam Bach dirigido a niños de 2 a 7 años. También desde Alemania Les Voisins lanzará una propuesta inteligente que atrapa al espectador de todas las edades: La reina de los colores, una pequeña comedia musical que, fusionando el teatro de sombras, música y video, y basada en un libro de Jutta Bauer, habla de lo que cuentan los colores y de lo que ocurre cuando todo se vuelve gris.

 

 

32 Festival Internacional de Teatro de Títeres Titirimundi de Segovia en Madrid
Pavel Smíd

 

 

Títeres de Europa del Este

La mayoría de nosotros sigue diciendo día tras día que tiene poco tiempo o que no tiene tiempo para nada. ¿Por qué? ¿Es mejor tener prisa o hacerlo todo despacio? Éstas y otras preguntas se responderán de manera divertida en Una clase sobre el tiempo, donde Pavel Šmíd enseñará al público cómo tratar el tiempo para que nos guíe a lo largo de nuestras vidas a través de un cuento con varios niveles de lectura. También Bence Sarkadi, desde Hungría, llegará con un tipo de marionetas de hilo característico de Europa Central y una técnica llena de virtuosismo plasmada en un original conjunto de títeres.

 

 

 

Poesía y cabaret

Mr. Barti es un montaje que conmueve por una ternura sin medida gracias a la vida que brota de las habilidosas manos de Alex Jorgensen y de su marioneta, movida con decenas de hilos y un ensamblaje de perfecto movimiento que hasta es capaz de alzar las cejas o hace parpadear a este concertista único. Al igual que el estudio de movimiento de Sofie Krog y su montaje talismán, Diva.Una endiablada combinación de teatro de marionetas de estilo libre, cabaret y poesía bizarra, envuelta en una comedia original donde todo sorprende continuamente. Nadie puede decir que haya visto antes algo así.

 

 

 

Calles con montajes de guante, clown y un espectáculo único: Culbuto

Si los hilos son, en su mayoría, de los patios en esta edición, el guante domina en la calle, con las propuestas de El Chonchón, Salvatore Gatto, Dan Bishop y La gotera de lazotea, que en esta ocasión aporta una relectura del cuento popular de Garbancito, pero ofreciendo la respuesta a lo que el pequeño personaje vivió en la barriga del buey. Plansjet volverá con sus marionetas danzarinas, auténticas obras de arte en madera que bailan sin parar de manos de los artesanos titiriteros Chris Geris y Mieke. Además, el clown Paul Durand, de la compañía Petit Monsieur, enseñará al público cómo doblar en dos segundos una tienda de campaña, y Mauvais Coton ofrecerá un número de circo para un mástil culbuto: un montaje único en el mundo con inestabilidad crónica, para oscilar en lo desconocido, romper puntos de referencia y experimentar límites. Acaso para aprender a volar. Porque todo es posible en Titirimundi… Hasta las vueltas de la vida… El Carrusel Magique, construido por La Machine, de Nantes, emblema del Festival, volverá a girar su rueda de ensueño y a transportar a sus viajeros a través del universo imaginario de Julio Verne, quizá como metáfora del tiempo que no se detiene y de la vida que se renueva.

 

 

 

Titiricole cumple 20 años ofreciendo a escolares y maestros la oportunidad de convertirse en titiriteros

Titiricole, la propuesta de Titirimundi para el público infantil que desde 1998 ofrece a los niños la oportunidad de realizar sus títeres en la escuela y representar sus obras en los mismos espacios que los titiriteros, cumple 20 años. Y lo hará con 21 piezas de teatro de títeres representadas por niños de 16 colegios. Una oportunidad para conocer el Festival desde la infancia.

 

 

 

Titirimundi se extiende por la Península

Titirimundi puede presumir de que los mejores titiriteros se den cita en él y de que existan pocas ciudades en el mundo que gocen de un festival anual de títeres de tal solidez y dimensión (en contraposición a ferias, semanas de títeres o programación, la mayoría de las veces solamente infantil, que se desarrollan en distintas ciudades), en el que la realidad intrínseca a este arte teatral se respire en cada momento, apropiándose de todos los públicos gracias a espectáculos para adultos, para niños o para público familiar y heterogéneo, que puede disfrutar de multiplicidad de montajes.

 

Segovia es la ciudad de los títeres por excelencia, y tiene cada vez más extensiones tanto en la provincia (31 pueblso) como en diferentes ciudades y localidades de Castilla y León (Ávila, Arenas de San Pedro y Candeleda; Burgos; León; Salamanca; y colaboración con Zamora), la Comunidad de Madrid (Alcalá de Henares-Corral de Comedias, Alcobendas, Guadarrama, Madrid –Parque de El Retiro y Plaza de Oriente, Fiestas de San Isidro-, Pozuelo de Alarcón y Soto del Real) e incluso de La Rioja (Logroño), Navarra (Colaboración con Barañáin), Asturias (Colaboración con el Festival TitereSí de Siero) y Galicia (Colaboración con el Festival de Redondela, Pontevedra).