Mirar con los ojos de María Velasco

 

Por Sergio Díaz

Fotos: marcosGpunto

 

Sin que tenga nada que ver con el argumento de la película de los Cohen, cada vez que me acerco a un texto de María Velasco lo que se me viene a la cabeza es la frase: Quemar después de leer -pero no de forma literal, claro-. Sus textos purifican, activan el cuerpo y la mente y son capaces de arrasar con todo. Como ella, que es puro power-metal, pero tan bien construido, tan lleno de matices y sutilezas que es como si la música que sale de sus ma nos y su cabeza la ejecutara una orquesta de cámara… vestidos con chupa de cuero, eso sí.

El teatro de María Velasco no es autocomplaciente. No es un satisfyer que te provoca orgasmos en menos de dos minutos. No es de consumo rápido. Es una exploración del mundo. Es adentrarse en lugares desconocidos, aunque aborde historias de las que ya se ha hablado antes como es el caso de la obra que nos ocupa en esta página, que se centra en el trío amoroso quizás más famoso de la literatura, aquel que formaron Henry Miller, Anaïs Nïn y una ‘taxi girl’.

Javier Giner dirige esta premiada obra de María Velasco, que fue galardonada con el Premio Max Aub de Teatro en Castellano de la Ciutat de Valéncia 2017, que está protagonizada por Carlos Troya, Celia Freijeiro y Eva Llorach. El título hace referencia a una expresión sin traducción directa en nuestro idioma que se refiere a las compañeras de baile de pago que se popularizaron a comienzos del siglo XX. Una de esas chicas, June Mansfield tejió una relación con el novelista estadounidense, llegando a contraer matrimonio con él. Pero poco antes, Miller inició un romance con Nïn, la famosa escritora de novelas de estilo surrealista francés.

Así, como decíamos, el teatro de María Velasco nos confronta con paisajes lejanos, no porque estén lejos, ese paisaje puede ser la misma calle en la que vivimos, sino porque nunca nos hemos parado a observar esa calle tal y como María Velasco la mira. Y esta obra nos obliga a mirar y cuestionar temas que aparentemente ya damos por sabidos: temas como la prostitución, el amor romántico, la sexualidad, la posesión, la incomprensión, los celos y el poder de la mujer. Y cuando miramos a través de sus ojos, cuando la leemos, somos capaces de comprender mejor. Somos capaces de quemar todo a nuestro alrededor y volver a empezar.