Madrid. 29 de agosto de 2018

 

«Si el teatro ha sido creado para permitir que nuestras represiones cobren vida,
esa especie de atroz poesía expresada en actos extraños que alteran los hechos de la vida
demuestra que la intensidad de la vida sigue intacta, 
y que bastaría con dirigirla mejor.» 
Antonin Artaud. El teatro y su doble

 

¿Por qué insistimos en el teatro, si no nos da para vivir?

¿Por qué nos gusta ser kamikazes, suicidas temerarios disfrazados de intelectuales?

¿Por qué siguen unos produciendo y otros -nosotros- contándolo?

¿Por qué pensamos que podemos cambiar el mundo señalando sus debilidades?

¿Por qué invertimos en un páramo donde un tiburón de los negocios solo verá terreno baldío?

¿Por qué aplicar novedosas técnicas de marketing relacional si luego lo entregamos todo al boca a oreja más antiguo?

¿Por qué seguimos diciendo apaga la tele y abre un libro?

¿Por qué pedimos a la gente que cambie el fútbol por la danza contemporánea?

¿Por qué llevamos a los niños a ver, otra vez, Caperucita?

¿Por qué cambiamos los cuentos tradicionales para darles un enfoque moderno y feminista?

¿Por qué miramos por encima del hombro a «los perroflautas que hacen circo»?

¿Por qué nos entregamos al onanismo sectorial y le lloramos a los políticos para que solucionen nuestros problemas?

¿Por qué seguimos usando la expresión “empresario de paredes”?

¿Por qué tenemos miedo de levantar la voz contra los productores déspotas, contra los directores déspotas, contra las estrellas déspotas?

¿Por qué Jan Fabre sí y Lluis Pasqual no?

¿Por qué enseñamos las tetas en Instagram para reivindicarnos?

¿Por qué sigue habiendo críticos de teatro?

¿Por qué llenamos los dossieres de prensa de mentiras flagrantes?

¿Por qué pagamos 15 euros por una coca-cola en el descanso de El rey león?

¿Por qué citamos todo el puto rato a Samuel Beckett (fracasa otra vez, fracasa mejor)?

¿Por qué nos dejamos sodomizar a cambio de un gramo de visibilidad?

¿Por qué todo funciona a base de talento social?

¿Por qué navegamos con yates alquilados sobre el mar de la precariedad?

¿Por qué escribimos editoriales quejumbrosos si estamos saliendo de la crisis y el teatro de Madrid vuelve a lucir esplendoroso con sus mil estrenos?

¿Por qué?

 

 

Foto: Imagen del espectáculo Orbis de Humanhood presente en la última edición de FiraTárrega