Por Sergio Díaz

Foto: Pablo Blanco

 

Brillante ejercicio escénico de la Compañía Teatro En Vilo en la que diseccionan, con mucho sentido del humor, los miedos y temores de la generación millennial. Tras presentarse en el Festival Talent 2017 de los Teatros del Canal y haber estrenado su montaje en el Centro Dramático Nacional, ahora llegan al Teatro del Barrio.

 

Teatro En Vilo es una de las compañías más interesantes del panorama teatral contemporáneo. Sé que decir esto es mucho, que puede ser un recurso manido o que se puede decir de tanto y tan bueno que tenemos en estos momentos por nuestro teatro. Pero es así, indiscutiblemente es así. Si alguien se presenta al público con una obra como Interrupted, en la que te dejan con la boca abierta desde el minuto uno: The sky is the limit! Pero hay que avanzar y volver a saltar al vacío para seguir expresándote y de paso mostrarle al mundo de lo que eres capaz…

 

Repletas de talento

…Y allí estábamos, de nuevo en el Festival Talent 2017 de los Teatros del Canal, en la plataforma en la que esta compañía se había dado a conocer -cumpliendo con creces el objetivo de ese festival- y al que volvían ahora. Las expectativas estaban altas con ellas, ya que fueron las ganadoras del Best Talent Madrid 2013 (con Interrupted, precisamente) y había ganas de ver cómo habían evolucionado en estos cinco años. Y lo volvieron a hacer… Se presentaron ante el público de una forma sencilla y natural, como hacen ellas las cosas. Sin imaginarte la desbordante energía que son capaces de desplegar simplemente con sus cuerpos.

Generación why son tres actrices (Chiara Goldsmith, Roisin O’Mahony y Noemi Rodríguez Fernández) y una maestra de ceremonias (Andrea Jiménez García) que las va guiando por una suerte de ejercicio escénico, que en realidad es un ejercicio sobre la vida. Reflexiones personales de cada una de ellas, como si asistieran a un casting para optar a un refrescante nuevo papel teatral, pero en realidad tienen que hacer de sí mismas. Y todo ello lo van desplegando con suma facilidad, como si no costara. Con un realismo que hace que todo parezca sencillo. Pero si hay algo que caracteriza a Teatro En Vilo son las horas de trabajo y de investigación para lograr que sus espectáculos estén perfectamente coreografiados, consiguiendo un ritmo perfecto que hace que siempre estés enganchado a la historia. Consiguen que durante buena parte del espectáculo estés con una medio sonrisa en la boca, aunque transites por momentos crudos, pero una sonrisa de satisfacción, como de estar asistiendo a un momento cautivador escénicamente. Pero para que tampoco te pierdas en la intensidad del momento, siempre aparece la socarrona vis cómica de las actrices (muy característica de Teatro En Vilo) para hacerte pasar de esa media sonrisa anhelante -por seguir queriendo más- a una sonora carcajada.

 

¿Y ahora qué?

Esta obra representa los sueños de una generación que busca su camino. La generación Y, la generación millennial, los y las que crecieron en los años 90, los y las que lo tuvieron todo y que con tanta opción alrededor no supieron muy bien por qué camino tirar. Una generación abrumada por las altísimas expectativas que se puso en ella. Y ahora que han crecido, el miedo por no cumplir esos objetivos marcados las atenaza. Y durante la función nos preguntan, y se preguntan: ¿Qué quieres para tu futuro? ¿Cómo podemos mirar hacia adelante? ¿Qué rol tomar en la vida? ¿En qué creer?, y ellas mismas tratan de responderse y respondernos, con la lógica dificultad que suscitan esas preguntas tan trascendentales.

Es una obra fresca y divertida que nos invita a reflexionar y a seguir trabajando por no alejarnos demasiado de nuestros sueños. Nos invita a saltar al vacío y enfrentarnos cada día a los que somos y a lo que hemos conseguido. Podemos perderlo todo, pero al menos no podrán decir que no lo intentamos.

Ellas, Teatro En Vilo, ya nos está demostrando que en cada montaje sí que se atreven a saltar, a saltar de verdad. Estas magníficas creadoras pertenecen a la generación why not?