Numerosas propuestas en nuestra ciudad conmemorarán este 2020 los 100 años de la muerte del escritor que mejor supo entender y reflejar Madrid tanto en su obra literaria como periodística. Una de ellas, el ciclo Desembarco Galdós del Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa, tendrá lugar este octubre e incluirá dos obras teatrales, un documental y una conferencia.

 

Por David Hinarejos

 

La transversalidad de Galdós

 

En 1920 fallecía Benito Pérez Galdós, uno de los mejores novelistas españoles de todos los tiempos y un cronista imprescindible de su época. 30.000 vecinos de Madrid, multitud de artistas e intelectuales y (muy pocos) representantes de instituciones y políticos acudieron a su funeral en el cementerio de la Almudena. No sé si puede haber una imagen más representativa que esa para definir su vida. De él se ha dicho y escrito largo y tendido, pero quizás convendría destacar, en estos tiempos que corren de sectarismos y propensión al etiquetado, su transversalidad. Supo leer y reflexionar como nadie sobre los distintos estratos sociales, siendo tan popular entre el pueblo llano como entre las élites. Fue un amante del arte en su concepción más amplia, aparte de novelista fue un prolífico dramaturgo, un apasionado de la poesía y durante un tiempo ejerció de crítico musical. Políticamente nunca le importó mostrar sus preferencias (lo que le costó durante décadas el olvido institucional), incluso llegando a ser diputado, al tiempo que lo compaginaba con su actividad periodística colaborando en multitud de medios y hasta fundando uno propio, el periódico La Antorcha. Su mirada iba de lo internacional a lo local, era capaz de leer en inglés, portugués y francés, gracias en parte a sus innumerables viajes. Y, por concluir, supo mostrar a la mujer, más bien a una enorme variedad de mujeres, con una profundidad pocas veces antes vista en la literatura desde una pluma masculina.

 

Galdós y Madrid

Tantos años pasó Galdós en Madrid desde que llegó allá por 1862, procedente de su Las Palmas de Gran Canaria natal, y tanto ha significado para la ciudad que también supo inmortalizar, que cuesta creer que hasta el año pasado no fuera nombrado Hijo adoptivo de Madrid. La deuda de la ciudad con él es inmensa y en este 2020 tanto Comunidad como Ayuntamiento han querido volcarse con la conmemoración del centenario de su muerte (eso sí, por separado). La primera lleva desarrollando toda una serie de propuestas en el llamado Año Galdós 2020 que podéis consultar en su página web y que, entre otras propuestas, incluye el estreno de Torquemada bajo la batuta de Ignacio García May en los Teatros del Canal en diciembre. Por su parte, el consistorio madrileño bajo el título de Galdós es Madrid ha puesto en marcha desde visitas guiadas por el Madrid del escritor hasta la creación de un mapa cultural ilustrado, pasando por una exposición sobre su figura en la Biblioteca Histórica Municipal o lecturas dramatizadas de algunos de sus textos en el Teatro Español (noviembre). También, y es lo que aquí nos ocupa, ha organizado el Ciclo Desembarco Galdós que se desarrollará este mes de octubre en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa. El ciclo incluirá una Conferencia de Nieves Concostrina (20 oct.); la exhibición del documental El Siglo de Galdós (7 oct. y otras fechas por confirmar), dirigido por Miguel Ángel Calvo y coproducido por Salto de Eje PC y RTVE; y el estreno de dos montajes de inspiración galdosiana: Bien está que fuera tu tierra, Galdós y Ana, también a nosotros nos llevará el olvido.

 

Una investigación escénica en directo

BIEN ESTÁ QUE FUERA TU TIERRA, GALDÓSVenezia Teatro se ha embarcado en Bien está que fuera tu tierra, Galdós en un proyecto de indagación que nació de preguntarse ¿cómo repensar a Galdós desde el siglo XXI? La respuesta llegó con un golpe de suerte: el descubrimiento en los archivos de la Biblioteca Nacional de la autobiografía novelada que Galdós escribió en sus últimos días y que jamás dio a conocer. A través de la escritura y dramatización en directo de estos manuscritos, los ecos de la historia e intrahistoria de nuestro país atravesarán la representación: Sisita, José María de Pereda, Real Academia Española, Concepción Arenal, El Liberal, Pardo Bazán, Café Universal, Valle Inclán, Maura, Isabel II, Exposición Universal, el PSOE, Margarita Xirgú, Clarín, Teatro Español… Alma García escribe y José Gómez-Friha dirige este juego entre las fronteras de la ficción en el que los cinco actores protagonistas (Esther Isla, Macarena Sanz, Alma García, Antonio Fernández y Julio Hidalgo) se verán reconvertidos en investigadores escénicos.

 

 

Tristana como inspiración

El merecido homenaje a Galdós en MadridUnahoramenos Producciones obtuvo en 2019 por su montaje Ana, también a nosotros nos llevará el olvido cuatro candidaturas a los Premios Max y seis Premios Réplica del Teatro Canario: Mejor Espectáculo, Mejor Dirección, Mejor Interpretación, Mejor Escenografía y Mejor Iluminación. El texto de Irma Correa, inspirado en la obra Tristana de Galdós y con reminiscencias de Casa de Muñecas de Ibsen, es una reflexión sobre la lucha por la liberación de la mujer en los años 60 abordada a través de la historia de Ana, una ama de casa convencional de la época. Casada con un abogado, verá como su vida da un giro el día que conoce a Vivian, una fotógrafa francesa de espíritu libre que le hará ver que su vida no es, ni de lejos, lo que ella en el fondo ansía. La obra dirigida por Mario Vega surgió del Laboratorio Galdós, un proyecto del Teatro Pérez Galdós de Las Palmas de Gran Canaria del que también han salido los montajes de El crimen de la calle Fuencarral (2019) y El último viaje de Galdós (2020).